Luis Fernando Gutiérrez-Cardona
El socialismo es la filosofia
de la culpabilidad ajena.
—Nicolás Gómez D.
El sancocho nacional
(en forma de sancocho o plato montañero)
Hay una extraña corriente de ira y frustraciones. Todo el mundo, valiéndose de las redes en uso, se considera al mismo tiempo dueño de la verdad y ajeno a ella. Se deshace de ira por sufrimientos que no tiene y se olvida de los que efectivamente hay. "Me quitaron las horas extras" clama un "niño" de 30 años que jamás ha trabajado y remata: "asesinaron nuestra esperanza" por el aniversario de Gaitán. Insultamos por reflejo. Imponemos nuestro criterio bajo el supuesto de que los otros son estúpidos, apoyados en memes de ningún valor intelectual, mera burla. El gran personaje para muchos es un chistoso televisivo "fallecido en extrañas circunstancias" en 1999. Tiempos de upa en términos actuales. Como no estamos formados para tener ideas propias, para exponerlas y someterlas a escrutinio aguantando elogios y críticas, apoyamos la caricatura imbécil de alguien que se llama "matador" a sí mismo, como si ese adjetivo fuera causal de orgullo. Creemos de la noche a la mañana en los pajaritos que hablan de salud gratis, universidad gratis y para todos, comida gratis, agua y energía gratis; ¿comida gratis? si, mientras haya, como en Venezuela en donde desorganizaron la economía de tal manera, que están como están, pero tienen a Bolívar y tienen patria; y dicen que somos Suecia, que solo es que no lo sabemos, convencidos de que repartir la basura es repartir la riqueza. ¿Quién resulta pagando lo que es gratis? Los que trabajan. ¿Y para qué trabajar si todo es gratis? Los aguacates reemplazarán la gasolina, insiste el personaje y Ecopetrol según él no vale nada. ¿Y mi platica que tengo allí en acciones? No le importa. Pues, sepa usted, que no quiero nada gratis: quiero poder satisfacer con oportunidades mis necesidades pero no quiero que le quiten nada a nadie -aunque le sobre- para dármelo a mi, ¿está claro? ¿Podrá administrar bien el pais quién ni siquiera es capaz de administrar las cuotas de su casa? La paz es plan y es amenaza. El tipo que se luce secuestrando y matando, ahora lo hace traficando. Se sabía de la impunidad hacia atrás, no hacía adelante. Paz con exprópiese o con lucha de clases en un país en que estás clasificado no por realidad sino por estrato: ¿en que me parezco a Luis Carlos Sarmiento? En que los dos vivimos en estrato seis lo cual me hace igual a él. Él, con sus diez mil millones de dólares y yo con mi deuda con él de un millón que me saldrá en uno y medio. Qué tontería. Los ricos nos roban, sí. Y los políticos, sí. ¿Y los pobres? ¿saben de las trampas del sisben? ¿no han oído hablar de "la pensión que se va a perder" y cómo casar la anciana moribunda con el primo bobo para poderla sustituir? Los locos tomándose el manicomio. Transversalmente, para usar otra palabra de moda, la amargura campea, el amor por el odio es el signo de los jóvenes y en los viejos el resentimieto. Entonces para mantener la cordura, en prevención: no escuche, no lea, no vea.
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