Camila

Luis Fernando Gutiérrez-Cardona

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Antepones tu condición de médico para sostener tus posturas políticas basadas en las desastrosas condiciones del sistema de salud, culpa según tú de quién sabemos. Vale.

¿Es Dios responsable de que la gente mate por haber dictado el mandamiento de "no matar", o de que robe porque dijo "no robar"? ¿Y si cambiamos de Dios dejará esa ley de fallar? ¿Hay dos leyes más directas y claras que esas y más transgredidas? Y hablo de Dios que en vez de hacerlo por ley podría hacer que el hombre no tuviese la facultad de matar o robar, como no tiene la de volar o respirar debajo del agua conforme a su diseño. No creo en ese Dios. Ni en ese ni en ninguno que se crea, o crean, tal cosa. Y si creyera ello no evita  que gente mate y robe. ¿El rayo divino del nuevo Zeus lo hará?

¿Leíste el libro del ministro Alejandro Gaviria? ¿Supones que un tipo de semejante sensibilidad e inteligencia, y con esa enfermedad encima,  no hace nada? El factor humano, la corrupción en todas partes, si, también entre los médicos, es el desastre. ¿O no se requiere de ellos para el cartel de la hemofilia? ¿Para el de las jubilaciones por incapacidad, y para cada defraudación al sistema? ¿No es con médicos con quiénes los políticos se reparten esa marrana?  ¿Los Palacino, que pululan unos como grandes monstruos y otros como termitas que carcomen,, desaparecerán a la llegada del mesías? La radiografía no es la enfermedad. También la gente común y corriente defrauda el sistema de salud de muchas formas.

La culpa de que compren camiones de basura podridos no es de los camiones si no del que los compró. No me gusta que hayamos quedado entre los polos querida Camila. No me refiero a derecha e izquierda sino al polo de lo odiado y al de lo que odia. A la lucha de clases: "el miedo de los ricos es la esperanza de los pobres" ¡qué barbaridad!  No me gusta que me ofrezcan cosas gratis porque lo  gratis para unos será muy costoso para otros y a la larga para todos, cuando no haya para nadie.  Ni me gusta el mercado de derechos.  Al derecho a la salud habría que anteponer la obligación de no enfermar; al derecho a la vida la obligación de no vivir y la desaparición del derecho y obligación de morir. Al derecho al derecho la obligación de ninguna obligación como derecho. Surreal.

No me gusta el ciudadano que evita declarar renta a tiempo porque denota que no respeta lo que millones si, yo entre ellos. Ni el autocrático que  fabrica normas  a su amaño o aplica leyes ferendas.

El problema no es si Colombia puede ser Alemania sino si los colombianos podemos ser alemanes, suponiendo que ello sea lo ideal. Me parece, y lo digo sin animosidad.

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