Epicuro

"Haec, inquit, ego non multis, sed tibi; satis enim magnum alter alteri theatrum sumus. "
Epicuro

"Cerca de mi no hay más que lejanias."
Antonio Porchia

febrero 20, 2024

Pedro Jaime

 

Es un recorrido de cuatrocientos cincuenta kilómetros de Manizales a Neiva. La sorprendente Colombia se muestra pasando por las llamada nieves perpetuas del Ruiz, no tan perpetuas ya, más bien escasas, por las estribaciones cordilleranas, por los valles, a la ardiente ciudad donde vive desde hace cincuenta años ese hermano mayor en todo para mi, amplio, generoso en humanidad y en sentimientos cuyo hogar no visitaba desde hacía casi veinte años. Ha cambiado mucho el recorrido desde entonces. Las carreteras han avanzado, han dejado a un lado los pueblos y las ciudades, en los campos hay ganado a veces, a veces, cultivos, la mayoría de las veces nada. Pero no es territorio abandonado, tiene propietarios, está resguardado, requiere de desarrollo o más propiamente: de necesidad de desarrollo. Es como que el país es tan feraz, tan poderoso, que lo poco que se explota alcanza y sobra. Neiva luce enormemente activa, un tris caótica, llena de comercio, abundante. Diferente. Con esas diferencias producto del entorno, de la temperatura. Fuimos un poco más al sur, hasta Garzón bordeando las que se diseñaron seguramente como enormes represas sobre el río grande de la Magdalena, bajas porque el río no es de las características de cuando se hicieron. Porque el hombre que  construye, destruye.

Fuimos, mi hermano menor y yo, a lo que fuimos. A ver esa parte de la familia que por haberse criado en una ciudad diferente del resto de su núcleo, apenas vemos sí cuando pasa por este. Porque ellos siempre llegan al llamarlos. Nunca han sido lejanos, no dudan en aparecer cuando hace falta. Estamos grandes ya, y no tan bien en temas de salud, altos de tensión, articulaciones gastadas, sentidos resentidos. Nos asomamos al territorio oscuro, acumulamos ya achaques. El espíritu suyo nos alienta, su abrazo enorme, ese bondadoso corazón del que participa su esposa y  que pasaron a los suyos, a sus hijos, a sus hermosos nietos de hermosos nombres: Gloria, Santiago, Celeste, Lorena, Natali Sofia... Emmanuel, Jaime Andrés, Luciana. Todos de ancho pecho.

Grande y ajeno mundo que no se niega a ser mirado, al que tendría que haberse dedicado más tiempo, más cariño.

Uno vuelve a su casa recargado de afecto, de palabras, de dudas y de pensamientos. Desrecorrimos lo andado por otra ruta no menos hermosa  y recorrimos también, de ida y vuelta, la indefinible vida.

Se piensa en un poema de Idea Vilariño:

Todo es muy simple mucho
más simple y sin embargo
aún así hay momentos
en que es demasiado para mí
en que no entiendo
y no sé si reírme a carcajadas
o si llorar de miedo
o estarme aquí sin llanto
sin risas
en silencio
asumiendo mi vida
mi tránsito
mi tiempo.



 


 


 

No hay comentarios.: