Luis Fernando Gutiérrez-Cardona
Uno viajaba en libro a todas partes
Elena Walsh
Elena Walsh
Mi padre, hablando entre dientes, preguntaba cada tanto señalando el cerro frente a la ventana:
— ¿De cuántos zurronados se botará Morrón?.
Nosotros, que a pesar de no haber llegado tan tarde tampoco lo hicimos tan temprano, no teníamos idea de que era un zurrón ni vimos uno solo leyendo El Quijote como él hacia.
— ¡Puff! –respondíamos por intuición– ¡muchísimos!.
— Pues no –decia él– todo depende del tamaño del zurrón.
A lo mejor llevamos un zurrón muy grande.
Anoche, pasando páginas de Viaje a Pié de Fernando González, me encontré con esta frase:
"Estoy triste porque no hallo un fin que me interese. Si todo es igual, ¿por qué no adoptar el de la alegría? En eso consiste el ser buenos, en alegrarnos".
Todo es cuestión de ánimo, concluye.
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