Luis Fernando Gutiérrez-Cardona
Se oyen extrañas músicas celestiales, y también ruido, demasiado ruido.
Mi corazón ese pedazo de carne balbuciente y terco.
Mi mente, telón de
fondo, blanco caleidoscópico.
No sé.
Cada cosa me define.
Rumor de
puertas que se cierran.
§
No hay comentarios.:
Publicar un comentario