Luis Fernando Gutiérrez-Cardona
No
tiene ojos. Su mirada es un escaner de precisión atento a la menor
anomalía. Sus oidos, radares de alta tecnología, captan solo lo
que le disgusta, y le disgusta todo. Su lengua es un proyectil
teledirigido al alma, conectado por vía de alta velocidad con su cabeza reactiva. Sus demás sentidos siempre en alerta de primer grado. No siente, presagia. Su mente es una banca
de inversión. Su corazón, como su voluntad, granito puro.
No hay comentarios.:
Publicar un comentario