Luis Fernando Gutiérrez-Cardona
Quizás tenga que ver nuestros hábitos de compra. Me acerqué a un lugar con muchos libros no necesariamente nuevos, no necesariamente los de moda, sin marcas y sin relumbrón. Y se abrió un mundo de posibilidades. Al hojear lo que me mostraban una vez identificado el interés, o aprovechando lo que enseñaban a otros, me sentí acariciando no solo las páginas que ya habían visto el sol, sino también las de aquellos que se lo dieron a conocer y mirando los ojos de quienes ya los habían dejado correr por sus renglones. Los vendedores se identificaron conmigo y en tres minutos parecían saber más de mis gustos que yo mismo. Se interesaron por mi, abrieron allí mismo mi blog y me invitaron a visitar su casa en Medellín. Ofrecieron mostrarme su biblioteca personal de poesía que consideran donar o abrir al público. Salí cargado de tesoros habiendo pagado por diez lo que el día anterior pagué por uno. Decir pagar por libros es grosero. Ellos vienen a uno por alguna causa para ser amigos para siempre. Los únicos.Al abrir al azar uno de ellos se muestra unos versos de Hayat Saif -desconocido para mi hasta hoy- que la noche confirmó:
"Muerte desde la cercania de mi infancia.Muerte mientras era desgarrado del vientre de mi madre.Muerte cuando mi amigo me expulsó de la amistad.Muerte cuando fui separado del abrazo amoroso."
.
Epicuro
"Haec, inquit, ego non multis, sed tibi; satis enim magnum alter alteri theatrum sumus. "
Epicuro"Cerca de mi no hay más que lejanias."
Antonio Porchia
agosto 29, 2014
Libros
Suscribirse a:
Comentarios de la entrada (Atom)
No hay comentarios.:
Publicar un comentario