En las guerras la justicia la aplica el ganador. Como el ganador son las farep ellos juzgarán a los perdedores y a quienes los combatieron. Juzgarán al Innombrable I (Alvaro Uribe Vélez) a quien consideran su peor enemigo, pero también al Innombrable II (Juan Manuel Santos) que se atribuye el -a su modo de ver- asesinato de alias Raúl Reyes y de otros como él. Además era Ministro de Defensa cuando los falsos positivos. Cincuenta millones de colombianos perdieron, sin gloria alguna, la guerra contra veinte mil.
La revolución, como Saturno, devora a sus hijos (Trotsky, Bujarin, Kamenev, Zinoviev, Rakovski y Yagoda y luego Beria. También a Stalin aunque primero se aseguraron de que estuviera muerto. A Marat y a Robespierre. A Sucre y Bolívar). Si Hitler llega a coger a Churchill lo hace ahorcar, como los aliados ahorcaron a los jefes nazis y a Tojo. Hitler se les escapó suicidándose y el Emperador del Japón por interés. Mussolini fue fusilado "como un perro rabioso" por partisanos comunistas, mientras intentaba huir sin rumbo.
El paredón castrista será un tribunal. "No hemos cometido crimenes de guerra. Los fusilaremos a los que si" -es decir a los otros- dice el Innombrable III. (Timochenko) o sea Rodrigo Londoño Echeverri, conocido bajo los alias de «Timoleón Jiménez», «Timochenko» o «Timochenco» ha sido condenado en varios estrados colombianos: 40 años por perpetrar un atentado en 1998 contra una base militar; 34 años por el ataque contra el municipio de Gigante en el departamento del Huila; 25 años por el asesinato de monseñor Isaias Duarte; 27 años por el delito de secuestro, y 38 años por el asesinato de Consuelo Araújo Noguera, 'La Cacica', entre otras sentencias ya proferidas en diferentes instancias judiciales. Era buscado por el gobierno de los Estados Unidos, el cual ofreció 5.000.000 de dólares por su captura."
Ya no hay que buscarlo: se sabe donde está pero no importa. USA, como advirtiera Mao, es un tigre de papel. Más aun en estos tiempos.
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