Luis Fernando Gutiérrez-Cardona
Soy esa sietemilmillonésima parte que quiere perderse en tus brazos y en tus labios como una estrella entre las del universo. Que quiere aunque no quieras. Que lo calla por tanto. También te quiero y te deseo. Hemos estado cerca porque la distancia es insignificante. Te extraño. No es apropiado, pero si. Porque uno estima y aprecia y valora a quien se posa en su ser aunque comprenda que es imposible cuando hay ya un no en medio. Se es un ser humano y cuesta comprender y aceptar que ya no se es más ello porque se es humano hasta cierto punto -el de la decrepitud cada vez más pronta- a partir del cual ya no se es nada. Ni siquiera para sí mismo.
No hay comentarios.:
Publicar un comentario