He renunciado a ti. No era posible—Andres Bello
La alta noche, rumbo ya al amanecer, es hábil para los pensamientos y para rumiarlos. Pensar en ti. En como no me gustaría que nos deshicieramos uno del otro como aquellas flores que se lleva el viento. Pero las voces sin sonido. Pero el tiempo. Pero la distancia. Pero el devenir. Pero el yo y el tu que diferencia, distingue y aleja. El amor: ese algo inexistente, desmoronable, que existe cuando existe y mientras existe quien lo siente. La imagen empieza a deshacerse en la ausencia-presencia que no asume los cambios que ocurren día a día de la manera que solo se conocen por las comparaciones. Es triste que las dos palabras -te amo- que forman también el estado de enamorado, se vayan y que, de igual manera, se esfumen este y ellas...
Anoche yo pensaba en ti...
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